La élite mundial del ajedrez se reúne en Londres: Carlsen encabeza el Global Chess League
Del 3 al 12 de octubre, Londres acoge una de las competiciones de ajedrez más importantes del año, el Global Chess League (GCL), que tiene lugar en el Friends House de Euston. Ocho de los 12 mejores jugadores del mundo, incluido el número uno, Magnus Carlsen, se enfrentarán en este torneo. Las entradas para los espectadores están disponibles en línea.
Carlsen, junto con otras estrellas de la talla de Hikaru Nakamura (Estados Unidos), Arjun Erigaisi, Praggnanandhaa Rameshbabu y Vishy Anand (India), Nodirbek Abdusattorov (Uzbekistán), Alireza Firouzja (Francia), Wei Yi (China) y la mejor jugadora femenina del mundo, Hou Yifan (China), conforman una alineación estelar que promete acción de alto nivel.
Una ausencia notable es la del número 9 del mundo, el ruso Ian Nepomniachtchi, junto con otros dos grandes maestros rusos, Alexander Grischuk y Vladislav Artemiev, quienes aparentemente no obtuvieron sus visados para el Reino Unido. Sin embargo, las jugadoras rusas, entre ellas Kateryna Lagno, esposa de Grischuk, sí están compitiendo.
El torneo se celebra en formato de partidas rápidas, con seis equipos de franquicia, cada uno compuesto por tres hombres y dos mujeres grandes maestros, además de un joven jugador menor de 21 años. Este formato es similar al de la Indian Premier League de críquet o la NFL de fútbol americano, con una notable particularidad: es la única liga profesional donde hombres y mujeres juegan juntos en el mismo equipo. Cada partida tiene un tiempo límite de 20 minutos por jugador, lo que garantiza un ritmo vertiginoso y la posibilidad de errores bajo presión, algo que rara vez se ve en las competiciones de ajedrez clásico.
El evento arrancó de manera espectacular con una brillante victoria del polaco Jan-Krzysztof Duda, quien venció al indio Vidit Gujrathi en una partida de 29 movimientos.
El equipo de Carlsen, los Alpine Warriors, se perfila como el favorito para llevarse el título. El número uno del mundo llega a Londres tras su reciente victoria en la Julius Baer Cup, parte del Champions Tour, en el que ha sido dominante durante años. Además, Carlsen sigue siendo el mejor del mundo tanto en ajedrez rápido como en blitz, con un impresionante rating de 2834 puntos, 52 más que su rival más cercano, Wei Yi.
El equipo de Alpine Warriors también cuenta con el mejor dúo femenino. Hou Yifan, a pesar de estar semi-retirada del ajedrez y centrada en su carrera académica como profesora en la Universidad de Shenzhen, sigue demostrando su talento en sus esporádicas apariciones. Por su parte, Lagno, actual número 7 del mundo, ha ganado cuatro títulos mundiales en las modalidades rápida y blitz.
El torneo también genera expectativa por la participación de Alireza Firouzja, el jugador en mejor forma del momento. El francés, nacido en Irán, se coronó campeón de la Sinquefield Cup en St. Louis el pasado agosto, lo que ha hecho que muchos comparen su estilo táctico con el del legendario Mijaíl Tal. Firouzja es uno de los nombres a seguir en este evento, y su futuro parece incierto tras rumores de tensiones con su federación nacional, lo que podría llevar a un posible cambio de país de representación.
Además del GCL, Carlsen está involucrado en una nueva iniciativa llamada Ajedrez Freestyle, también conocido como Chess 960 o FischerRandom, donde la disposición de las piezas en la fila trasera se decide aleatoriamente. Este formato, que elimina la tediosa preparación de aperturas, tuvo su debut exitoso en Alemania a principios de este año. En 2025, se expandirá a nivel mundial con un Grand Slam de torneos en Estados Unidos y Sudáfrica, así como en su sede original cerca de Hamburgo.
La evolución del ajedrez profesional continúa con el aumento de los premios en metálico. La final del Global Chess League repartirá un millón de dólares en premios, mientras que el Ajedrez Freestyle otorgará 750.000 dólares en cada uno de sus tres torneos de 2025, con una bolsa que ascenderá a un millón en 2026.
Esta tendencia ha creado una división notable en el ajedrez internacional, donde los premios se concentran en la élite, con sumas millonarias para los mejores jugadores, mientras que los premios caen considerablemente para aquellos fuera de los 10, 20 o 50 mejores del mundo.