

Vaishali sorprende a la campeona mundial y Humpy lidera el Norway Chess femenino
Durante el primer día de descanso del torneo Norway Chess, Koneru Humpy no podía ocultar su alegría. Aprovechó la pausa para probar el tiro al blanco en un rancho, como parte de las actividades del evento, y logró acertar en el centro de la diana. Tan orgullosa estaba de su disparo que pidió llevarse el objetivo de papel como recuerdo.
Sin embargo, en apenas dos días podría marcharse de Stavanger (Noruega) con un trofeo mucho más valioso: el título femenino de uno de los torneos más prestigiosos del ajedrez mundial. A sus 38 años, Humpy se colocó al frente del campeonato femenino en el segundo día de descanso, aventajando por un punto completo a la campeona mundial Ju Wenjun (China) y a la ucraniana Anna Muzychuk.
Humpy derrotó por segunda vez en la sección clásica del torneo a la española de origen iraní Sarasadat Khademalsharieh, conocida como Sara Khadem, sumando así tres puntos en la octava ronda disputada el miércoles. Su ventaja en la clasificación se vio reforzada gracias a su compatriota Vaishali Rameshbabu, que consiguió una valiosa victoria sobre Ju Wenjun en la partida de desempate a ritmo Armagedón.
En este formato, la jugadora con blancas dispone de 10 minutos para ganar, mientras que quien lleva las negras cuenta con 7 minutos y le basta con hacer tablas.
Vaishali derrota a Ju Wenjun
Vaishali ya había sorprendido al forzar unas tablas con blancas ante la campeona mundial en la partida clásica, un logro notable dado que hay una diferencia de 99 puntos de Elo entre ambas. El duelo, planteado con la Defensa Berlín de la apertura Ruy López, fue muy equilibrado y no ofreció grandes emociones: durante las 37 jugadas que duró, la barra de evaluación apenas se movió.
Sin embargo, el verdadero espectáculo llegó en la partida Armagedón. Ambas ajedrecistas repitieron las mismas 12 jugadas de la partida clásica, hasta que Ju cambió su estrategia: en su jugada 13 empujó su peón de “c” en lugar de presionar al caballo avanzado de Vaishali con su alfil.
El duelo se mantuvo parejo hasta la jugada 32, cuando Vaishali cometió un error al permitir que Ju capturara un peón sin compensación. Pero en la siguiente jugada, Vaishali reaccionó de forma brillante con el avance del peón a f5 (33.f5), marcando su primer avance decisivo en la partida.
Solo cuatro jugadas más tarde, su peón amenazaba al rey rival mientras sus dos torres y su dama bloqueaban las columnas de escape del monarca chino. Sin salida, Ju se rindió, otorgándole a Vaishali una victoria crucial que representa un importante impulso anímico.
Gracias a este resultado, Humpy permanece en lo más alto de la tabla, con grandes opciones de conquistar el prestigioso título femenino del Norway Chess.

Fernando Alonso y su legado en Ferrari: una inteligencia que sorprendía al equipo
Han pasado ocho años desde que Fernando Alonso puso punto final a su etapa en Ferrari, tras cuatro temporadas en las que, aunque no logró conquistar el ansiado título mundial, dejó una huella imborrable dentro de la escudería italiana. Uno de los que aún recuerda su paso por Maranello es Massimo Rivola, actual director general del área de competición de Aprilia en MotoGP y antiguo miembro clave del equipo Ferrari en Fórmula 1.
Rivola, que comenzó su trayectoria en la Fórmula 1 en 1998 como parte del equipo de márketing de Minardi —donde coincidió por primera vez con Alonso—, volvió a trabajar con él en Ferrari a partir de 2010, tras pasar por Toro Rosso como director deportivo. Su llegada a la escudería italiana se produjo en 2008, y desde entonces fue testigo directo de la intensidad con la que trabajaba el piloto asturiano.
En una reciente entrevista concedida al diario Il Foglio, Rivola compartió algunas reflexiones sobre aquellos años con Alonso en la Scuderia. Destacó especialmente la capacidad del español para leer las carreras, una habilidad que, según sus palabras, superaba incluso la de los ingenieros desde el muro: “Nunca he visto a nadie interpretar una carrera como él. Hubo momentos en los que nos hacía sentir literalmente como idiotas, porque lo sabía todo”.
No era solo talento al volante. Alonso también participaba activamente en el desarrollo de las estrategias durante las carreras. Rivola recordó cómo, a pesar de tener acceso a numerosos monitores con datos e información en tiempo real, el piloto lograba anticiparse a los ingenieros: “Nosotros teníamos muchos datos delante, pero él llegaba a conclusiones antes que nosotros, y eso mientras pilotaba el coche”.
A pesar de ese compromiso y brillantez, el proyecto conjunto de Alonso y Ferrari no alcanzó su objetivo principal: el campeonato. Con el tiempo, ambos siguieron caminos distintos sin volver a alcanzar la gloria. Hoy en día, Alonso compite con Alpine tras regresar a la Fórmula 1 en 2021 tras un paréntesis. Por su parte, Ferrari también cuenta desde ese mismo año con otro talento español: Carlos Sainz.
Rivola también dedicó unas palabras al actual piloto madrileño, quien en 2021 sorprendió a muchos al superar a su compañero de equipo, Charles Leclerc, considerado el principal valor de futuro de la escudería: “Las buenas actuaciones de Carlos no me sorprenden en absoluto. Llevaba tiempo recomendando su fichaje. Siempre ha sido muy fuerte, rápido e inteligente”.
La historia de Fernando Alonso en Ferrari puede no haber terminado con un título, pero dejó una impresión profunda, no solo por su conducción, sino por su mente estratégica. Un recuerdo que aún resuena entre quienes compartieron box con él.