Hace ya mucho tiempo que las mujeres dejaron de ser una rara excepción en las carreras. Ahora, cada día son más y más protagonistas. Y por ello, queremos dedicarles un rincón especial en ValenciaRunner. Lo haremos con un nuevo blog personal en el que Rosario Carceller* (@Rosario_CV) nos contará a todos, ellos y ellas, su particular y femenina visión del mundo running. Es el ‘Una runner con tacones’ y no nos costará seguirle…
El otoño me ha dada la bienvenida de la mejor manera que sabe hacerlo. Sí, yo soy así y me amarro al primer virus que me encuentro, sin preguntarle siquiera de donde viene… seré descarada?. Una semana de incubación, varios días de fiebre y una semana de antibiótico que se traducen en dos semana de un entrenamiento como dicen en mi pueblo “de chicha y nabo”.
Dos semanas perdidas. Ahora lo retomo, débil débil, con mis fuerzas por los suelos. Me cuesta mucho volver a coger mi ritmo, ni siquiera encuentro uno con el me sienta cómoda ni en distancias cortas, cosa que me desespera a tres semana de la media maratón. La primera prueba de fuego que me pierdo, el Gran Fons del Carraixet que además salía desde mi pueblo…tristeza absoluta! Quedé a verla con los amigos que no corren.
Bego me dice, que valor tienen! Yo no podría! En mi cabeza se enciende la chispa. Le contesto… “A que si pierdes el metro corres?” Me dice que si. “Pues, si puedes correr por que llegas tarde puedes dar una vuelta a la manzana corriendo. Y si puedes correr una vuelta a la manzana puedes correr 5km. Y si puedes correr 5km en poco tiempo podrás correr un gran fondo. Solo es cuestión de vencer a la pereza”, le contesto.
Me responde con cara de póker: «Rosario, hablas como un anuncio de Nike”. Evidentemente lo saqué de la última campaña de Nike. Sólo esperaba el momento de readaptar el mensaje a la situación!
Entonces es cuando pienso: ‘Ros’, eres muy ‘freak’. Creo que esto se te va de las manos… Qué necesidad de torturar subliminalmente a mis amigos, los que no corren, sobre mi obsesión por las tiradas largas, por las Oakley Radar, por las Nike ID y la ropa técnica nada discreta… Nada más lejos de la realidad, ellos piensan que estoy enganchada, que soy runadicta. Lo que no saben es que pronto pueden ser ellos los que caigan en el vicio por que la teoría ya se la saben.
Entonces, salgo a la calle con mis alas esperando qu
e las sensaciones vuelvan a ser tan buenas como hace dos semanas. Corro. Me siento genial. No pienso, solo corro. Llevo 4 km y las piernas de repente, sin previo aviso, comienzan a temblar. Bajo el ritmo, pero ni aún así puedo continuar. Me siento cual Betty Espagueti.
O la infección o el antibiótico, pero uno de los dos me la ha robado y me ha dejado con fuerza cero. Entonces mi cabeza hace lo que normalmente no hace cuando corro; piensa. Me entran ganas de llorar. Pero sigo, sin apenas fuerza física pero si mental porque cabezona soy un rato y pienso en todos esos buenos consejos que todos mis amigos los que corren me han dado en este año y medio. En todo lo que he aprendido y en todo lo que me ha costado llegar hasta aquí. Cuatro frases que tengo grabadas a fuego en el hemisferio sur:
-Nunca dejes de disfrutar corriendo.
-Ves poco a poco pero nunca te detengas.
-Fija un objetivo en tu mente. No te rindas hasta llegar a el.
-Todo es cuestión de cabeza, de series y de echarle un par de narices.
Ayer me llama Gloria. Tenia una sorpresa para mi. Se ha apuntado a un club de atletismo. Casi lloro de la emoción. La publicidad subliminal realmente es efectiva. Una de mis mejores amigas que no corren va a ser runner!!! Le prometo que correremos juntas la Volta a Peu de las Fallas. Quien haya pensado en algún momento que no puede, que se reitere. Si yo puedo, todos podemos….yes, we run!
PD: si alguien encuentra mis fuerzas que me las mande vía twitter.
*Rosario Carceller es corredora del Club d’Atletisme Puçol y apasionada de las cosas que inspiran. Auténtica fan del running. Publicitaria de vocación y de profesión. Donante de ideas en la Agencia Kaplan.