Miguel Ángel Plaza Benita representa el triunfo de la constancia. La victoria por la pasión en lo que haces. El corredor de Serrano CA acaba de proclamarse campeón del mundo de Maratón para mayores de 45 años en la ciudad francesa de Lyon. A sus 48 años, firmó un sensacional 2:30:07 (alejado de su mejor marca de 2:26:54), en el maratón número 20 de su carrera deportiva, que comenzó tarde, a los 25 años. Aunque realmente se convirtió en un corredor de nivel en la última década, dentro del organigrama del club de Paterna.
Un tiempo y una medalla de oro con los que rubrica un sensacional año deportivo en el que también fue subcampeón de Europa en Media Maratón. Pero la victoria de Miguel Ángel Plaza está en el día a día. En disfrutar y sufrir como pocos su pasión por el atletismo. “Para mí creo que es llegar a lo máximo, un Campeonato del Mundo y ganar el oro… es lo máximo a lo que aspira un corredor popular como yo“, nos cuenta.
“Yo no he disfrutado en ningún Maratón. No sé lo que es disfrutar en una carrera por lo exigente que soy conmigo mismo. Disfruto de la experiencia previa y del recuerdo posterior. Pero cuando salgo a correr, lo doy todo. Y disfruto… sufriendo“, afirma este corredor. ¿Un veterano?
Bronce, plata… y oro
Bronce en el 10K del Campeonato de España, Plata en el Europeo de Media Maratón y oro en el Mundial de Maratón. Más kilómetros, más éxito: “Cuanto más distancia corro es cuando mejor voy. A medida que he ido subiendo la distancia y la competencia, he mejorado la posición hasta quedar primero. En las pruebas o distancias cortas son muy exigentes para mí. En esas carreras de 5 a 7 km siempre digo que voy con el gancho en el cuello. Me las tomo como una serie de calidad. Pero reconozco que para estar a la altura de la gente joven en estas carreras, me cuesta entrenar más de doble que ellos”. La edad no solo es cosa del DNI: “A veces no siento un veterano… siempre digo que cuando me ‘cargo’ a los más jóvenes que yo… no soy tan veterano“.
Un maratoniano que ha mejorado con los años, que ha ganado con la experiencia. “Siempre he dicho que tanto la velocidad como la técnica de carrera se alcanzan en los primeros años, siendo joven. A medida que pasan los años, sumas más experiencia, pero eso va en detrimento de la velocidad. Sin embargo, el maratoniano experto, con constancia y trabajo, puede mejorar su rendimiento”.
Una experiencia que le lleva a advertir de forma enérgica a todos los nuevos corredores que se lanzan a la larga distancia sin el necesario camino recorrido. “Ahora mismo se peca mucho de estar un año corriendo y lanzarse a una prueba como el Maratón. Es un error absoluto. Yo siempre he dicho que al Maratón hay que tenerle mucho respeto. No es cuestión de hacerlo, pase lo que pase, y ya llegaré a meta. A esta prueba tan exigente hay que llegar con unas garantías de, por lo menos, saber que lo vas a terminar en condiciones. No me vale que andes un kilómetro cada tres o cuatro que recorras desde la mitad de la prueba. Para mí, eso no es correr un Maratón. Hacerlo es correr de principio a final y siempre con el respeto que se merece”.
Sus próximos objetivos… y el Maratón de Valencia
Tras este relevante éxito personal, es complicado hallar nuevos retos. Pero alguno se encuentra en el horizonte: “Lo difícil va a ser mantenerse a este nivel, pero en febrero tengo el Maratón de Sevilla como objetivo, que va a ser Campeonato de España, que lo quiero preparar bien, y después el Campeonato de Media Maratón en Europa. ¿Bajar mi mejor marca? Es díficil quietarle segundos al 2:26:54, pero todavía me veo bien. No lo descarto. Me veo capacitado. Si el Mundial de Veteranos hubiera sido en Valencia, habría estado muy cerca de mi marca, porque este terreno no acompañaba y era una prueba para ir a por medalla, no a por marca”.
Este año, Miguel Ángel Plaza tomará la salida del XXXV Maratón de Valencia, pero será con otro objetivo. “Puede que haya alguna sorpresa en Valencia, no descarto estar en la línea de salida. Pero eso sí, no correrla a un nivel alto y exigente”. Y es que este corredor lo tiene claro. “Para mí, no hay otro Maratón como el de Valencia. Es el número uno, y más con este recorrido que hay y la meta. Es ideal para una buena marca”. Y nos lo cuenta, evidentemente, en la meta del Maratón de Valencia.
Su triunfo es el la constancia. El oro de una vida entregada a una pasión: correr.